La insoportable brevedad del si

Lunes 12con 13 minutos de la noche. Voy entrando a mi casa y me dispongo a exorcisizar todos los demonios que me vienen persiguiendo desde Zacatecas. No se si fueron tantas mascaras juntas o la profundidad de la mina, o si fue la bilingue letania que el sacerdote oficio en lo que pudo haber sido la boda mejor planeada. El escenario natural era de una arquitectura impresionante, nada mas adecuado para celebrar un matrimonio que una plaza de toros. El sacrifcio y el arte estaban por comenzar. Yo, ahi presente, siendo testigo, llorando a mares. Los sentimientos chocaban unos con otros y mi cerebro no sabia que camino tomar: por un lado estaba la idea de que solo amando verdaderamente eres capaz de prometer amar a alguien hasta que la muerte los separe. Que promesa tan fuerte, en lo prospero en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, solo un sentimiento muy profundo te puede llevar a creer que esto es cierto, sin embargo la realidad es diferente. El amor se ve cercado, pierde la libertad que lo caracteriza: ahora tiene que cumplir con compromisios preestablecidos, ya no hay mas espontaneidad, no hay mas sorpresas: Todo ya esta escrito. La hisoria nos cae como un piano desde un decimo piso, nos aplasta, nos rompe, no hay nada que amortigue el golpe, el que sobrevive queda en pedazos, fragmentos de el desparramados por todos lados. La escencia desaparece, la presencia la hechamos a golpes. continuara....